La carta del diablo es un misterio que fascinó a los estudiosos de todo el mundo desde 1600. Pero gracias a los esfuerzos de algunos físicos e informáticos del Ludum Science Center de Catania (Italia), la carta parece haber sido descifrada y el misterio resuelto.
La carta del diablo
El misterio de esta inquietante carta se remonta a 1676, cuando la monja de clausura María Crocifissa della Concezione se despertó de repente con “la mitad de su rostro izquierdo empapado de tinta negra” y una carta delante de ella. La carta estaba escrita en caracteres extraños e indescifrables y, según la monja, fue el mismo diablo quien se la dio, ordenándole que la firmara y se la diera a Dios. Algunas versiones dicen en cambio que fue la misma monja quien escribió la carta, mientras estaba poseida por Satanás.
La monja, después de una lucha con varios demonios, es capaz de resistir a la orden del diablo y no firma la carta, añadiendo sólo un “ohimè” (ay de mí). Ni las monjas que se acercaron a la habitación de Sor María Crocifissa ni la abadesa del convento pudieron descifrar esas extrañas inscripciones. Las monjas del convento mantuvieron el asunto absolutamente confidencial hasta unos días antes de la muerte de su hermana.
A partir de ese momento, muchas personas intentarán en vano resolver este intrincado misterio. La carta del diablo nunca será descifrada hasta hace unos días. Algunos científicos del Ludum Science Center de Catania han utilizado un software de descifrado que se encuentra en la internet profunda (deep web) para descifrar la carta del diablo, logrando descrifrarla. Asumiendo que la hipótesis de que el diablo escriba una carta a Dios no es plausible, los científicos han cargado en el software de descifrado los alfabetos que podría conocer la monja: griego, árabe y rúnico son algunos ejemplos. Increíblemente, el truco funcionó y la letra ha sido descifrada.
¿Qué dice la carta del diablo?
El programa logró descifrar la letra aislando primero los caracteres que se repiten y luego comparándolos con los de los alfabetos introducidos por los programadores.
De esta manera, frases como
Tal vez ahora, Styx
(el Estigio es uno de los cinco ríos presentes en el infierno según la mitología), pero también
Un Dios que oigo liberar a los mortales
Según la Iglesia, el diablo le pedía a Dios, en esa carta, que dejara a los hombres libres de pecar y los dejara a su suerte. Según los científicos, en cambio, la monja sufría de esquizofrenia u otro tipo de trastorno mental. Probablemente la vida monástica enclaustrada la había vuelto loca, o simplemente habría acentuado los problemas psíquicos que ya existían. El alfabeto con el que se escribió la letra, por lo tanto, no sería más que un alfabeto inventado por la misma monja, combinando símbolos de los diferentes alfabetos que ella conocía. Lo que es seguro es que la carta del diablo ha sido finalmente descifrada.
Dónde encontrar la carta
El original se conserva en el monasterio de Palma di Montechiaro, en la provincia de Agrigento, en la celda que perteneció a Sor María Crocifissa.
